"Carmen Mola ha conseguido que cambie de sospechoso veinte veces a lo largo de toda la novela lanzando anzuelos, dándonos todos los datos para que estemos absolutamente seguros de que es alguien y volviéndolos a desmontar con un nuevo giro hasta llegar a un final en el que todas las piezas encajan a la perfección.
Cuesta pensar que se trate de una autor/a novel ya que consigue mantener un ritmo trepidante a lo largo de toda la novela, mantener el interés en una subtrama que llega a su éxtasis al final de la novela y convirtiéndose en el punto principal de la que será la segunda parte y consiguiendo cerrar la novela que nos ocupa con un final redondo.
No quiero terminar sin destacar la cantidad de temas que se tratan en la novela y que se integran de manera natural en la investigación del caso: la homosexualidad, la cultura de la etnia gitana, la propagación de las noticias falsas en la red, el internet oscuro u oculto, los casos sin resolver o los que se intentan cerrar lo antes posible sin pruebas suficientes por la presión mediática, el alzheimer y todos los sentimientos que afloran en la novela: culpabilidad, respeto, protección, obsesión…, sin duda, en más de una ocasión, la novela te hace plantearte qué harías tú en su lugar."
De lector a lector
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Carmen Mola es el seudónimo de una escritora desconocida, según dicen, vive en Madrid, es profesora universitaria, está casada y tiene tres hijos, pero claro, nada se sabe. Según se afirma “La novia gitana” es su primera novela, pero, sinceramente, su estilo, su maestría en el relato, sus personajes... no parecen de un escritor amateur, al contrario, apuntan a uno con una amplia carrera, lo que ha desatado numerosas elucubraciones.
Con solo una novela en el mercado (desde abril de 2019, con dos) ha tenido un gran éxito, sacándose su obra en diversos países y se está rodando una serie para televisión con las peripecias de Elena Blanco y sus compañeros. La historia comienza con el asesinato de una joven gitana en la noche de su despedida de soltera. Las extrañas circunstancias y la crueldad del crimen hace intervenir a la BAC (Brigada de Análisis de Casos) dirigida por Elena Blanco, que desarrollaran una compleja investigación, cometiendo, como es de suponer, numerosos casos.
Su estilo es sumamente ágil, emplea una frase corta, concisa, precisa, sin apenas oraciones subordinadas, con ellas compone escenas de diverso tamaño, sin paja, que se suceden a un ritmo constante, de forma muy cinematográfica, formando capítulos cortos. Su texto atrapa al lector dentro de una compleja trama, de una escena a otra, haciendo difícil el abandonar la lectura. Sus novelas son duras y sangrientas, dominadas por el sadismo, como en otros maestros de la novela negra europea como Pier Lemaitre, Luca D'Andrea, Sandrone Dazieri o Mercedes Redondo.
Los personajes son creíbles, reales, con sus virtudes y sus defectos. No hay héroes no antihéroes, tan solo policías que tienen que compaginar su profesión con su vida privada, una vida privada eternamente postergada que les termina llevando a la soledad. Se aprecia como algunos aspectos de la vida privada de los personajes afecta negativamente en el funcionamiento del equipo, un detalle que le da gran realismo a la historia. La forma de crear los personajes (así como los escenarios) no son largas y aburridas descripciones, son los hechos, la acción, las palabras, las que nos van definiendo la forma de ser de los personajes, incluso deja asomar sentimientos como el cariño, el respeto, la envidia, los celos...
El epílogo puede aparecer un poco extenso e innecesario, pero eso es debido a que es una introducción a su segunda novela, continuación de esta, “La Red Púrpura”.
Para mi es una gran novela negra, llena de emoción, con un ritmo muy importante y un final final trepidante. Como anécdota, yo la he leído pocos meses después de hacerlo por primera vez y me acordaba de lo que sucedía, aun así, me he enganchado de nuevo y me costaba dejar la lectura, algo que suele suceder en la novela policíaca. Muy buena.
Facebook de César Colomer Morell
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Carmen Mola es el seudónimo de una escritora desconocida, según dicen, vive en Madrid, es profesora universitaria, está casada y tiene tres hijos, pero claro, nada se sabe. Según se afirma “La novia gitana” es su primera novela, pero, sinceramente, su estilo, su maestría en el relato, sus personajes... no parecen de un escritor amateur, al contrario, apuntan a uno con una amplia carrera, lo que ha desatado numerosas elucubraciones.
Con solo una novela en el mercado (desde abril de 2019, con dos) ha tenido un gran éxito, sacándose su obra en diversos países y se está rodando una serie para televisión con las peripecias de Elena Blanco y sus compañeros. La historia comienza con el asesinato de una joven gitana en la noche de su despedida de soltera. Las extrañas circunstancias y la crueldad del crimen hace intervenir a la BAC (Brigada de Análisis de Casos) dirigida por Elena Blanco, que desarrollaran una compleja investigación, cometiendo, como es de suponer, numerosos casos.
Su estilo es sumamente ágil, emplea una frase corta, concisa, precisa, sin apenas oraciones subordinadas, con ellas compone escenas de diverso tamaño, sin paja, que se suceden a un ritmo constante, de forma muy cinematográfica, formando capítulos cortos. Su texto atrapa al lector dentro de una compleja trama, de una escena a otra, haciendo difícil el abandonar la lectura. Sus novelas son duras y sangrientas, dominadas por el sadismo, como en otros maestros de la novela negra europea como Pier Lemaitre, Luca D'Andrea, Sandrone Dazieri o Mercedes Redondo.
Los personajes son creíbles, reales, con sus virtudes y sus defectos. No hay héroes no antihéroes, tan solo policías que tienen que compaginar su profesión con su vida privada, una vida privada eternamente postergada que les termina llevando a la soledad. Se aprecia como algunos aspectos de la vida privada de los personajes afecta negativamente en el funcionamiento del equipo, un detalle que le da gran realismo a la historia. La forma de crear los personajes (así como los escenarios) no son largas y aburridas descripciones, son los hechos, la acción, las palabras, las que nos van definiendo la forma de ser de los personajes, incluso deja asomar sentimientos como el cariño, el respeto, la envidia, los celos...
El epílogo puede aparecer un poco extenso e innecesario, pero eso es debido a que es una introducción a su segunda novela, continuación de esta, “La Red Púrpura”.
Para mi es una gran novela negra, llena de emoción, con un ritmo muy importante y un final final trepidante. Como anécdota, yo la he leído pocos meses después de hacerlo por primera vez y me acordaba de lo que sucedía, aun así, me he enganchado de nuevo y me costaba dejar la lectura, algo que suele suceder en la novela policíaca. Muy buena.
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