Como siempre, será en la cervecería La Nena de Albacete.
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Un sueño, unas voces, (entre la hierba alta ve unos esqueletos, dos calaveras, y oye unas voces que le dicen ¿creías que podías olvidarnos?, ¿creías que nosotros íbamos a olvidarte?), persiguen de forma recurrente la vida de la protagonista, Abby, y marcan el hilo conductor de la novela.
Estos sueños parecían haber desaparecido, hasta que el día de su boda vuelven a surgir y, a la mañana siguiente, Abby sufre un accidente al ser atropellada por un autobús, entrando en coma.
Su marido, Willen, se plantea qué ha podido ocurrir para que su mujer se bajase precipitadamente del autobús y se plantara delante de él siendo atropellada, surgiéndole la duda de si ha sido o no un accidente. Desconoce el pasado de Abby y no sabe de sus pesadillas con los esqueletos y las calaveras, no sabe que el día del accidente, cuando ella está en el autobús, sufre un ataque de pánico al rememorar esos sueños, esas voces que le recuerdan que es culpable de lo ocurrido.
Willen, profundamente enamorado de Abby, no se separa de su cama ni de noche ni de día, con su mano aferrada a la de ella, y “si tenía que pasarse el resto de su vida cuidándola, lo haría, porque la amaba y porque Jesús le daría fuerzas. Sus almas habían quedado unidas, eran “una sola carne”
Abby tenía cuatro años cuando ocurre un hecho que marcará el inicio del fatal destino de sus padres. Su padre, un ex soldado de la guerra de Irak, a su regreso le hace una pregunta: ¿Tiene mamá un amigo especial que la visita cuando papá no está?; y la niña, confundida, no sabe qué contestar. Y, ante la insistencia del padre, asiente con la cabeza: sí. A partir de este hecho, el padre acosará a su ex mujer, le hará chantaje emocional, llegando a un violento desenlace.
La novela muestra un magistral análisis psicológico de los personajes, adentrándonos en sus miedos, sus soledades, sus sentimientos, perfilando a través de sus pensamientos su carácter, así en el caso del marido, un hombre celoso, opresor, acosador, y posesivo, que entiende amar con propiedad, confianza con sumisión, y respeto con autoridad y violencia, y en el caso de Nicola, su mujer, como mujer sumisa, maltratada, que piensa de su marido que “no le pegaba. No muy fuerte, No con frecuencia. Sin lastimarla, sino más bien como una reprimenda”, y que vive con el miedo, por ella y por su hija, y que intentará librarse de su maltratador, pero no lo consigue.
En el caso de la protagonista, Abby, se perfila como una mujer que teme a los hombres, desconfiada, pues “siendo chica aprendes a no ofender a los desconocidos con tu rechazo. En particular a los hombres. A los desconocidos, pero tampoco a los jefes. Ni a los profesores, en sus tiempos de estudiante. Siempre sonriente y cordial, porque eres linda. Pero si dices lo que no toca o no sonríes con la vivacidad que se espera, un hombre puede volverse muy desagradable y rápido”. Desconfianza que le viene desde niña, desde aquella pregunta mal intencionada de su padre y su respuesta afirmativa, para no enfadarle, creándole un sentido de culpabilidad, cuando descubra unos esqueletos y unos cráneos entre la hierba. Ese sentimiento de culpa, la atormentará, y marcará su vida, y su relación con su marido Willen, que es la antítesis de su padre, pues no solo la quiere perdidamente, sino que la respeta, y la cuidará pase lo que pase.
En definitiva, una novela que no deja indiferente al lector, profundizando con crudeza y realismo en la violencia de género, analizando a los personajes, como si fuera una sesión de psicoanálisis, dejando al desnudo las posiciones del maltratador y la víctima, con un final sórdido, lleno de venganza emocional, y que como toda relación de maltrato y violencia, deja daños colaterales, en este caso en su hija, que desde niña tiene que soportar el sentimiento de ser culpable de la desaparición de sus padres, y que le impide ser feliz con su marido, un buen hombre que la ama y la respeta de verdad.
PEPE
Trhiller psicológico y un tanto onírico. Atractivo acercamiento, por parte de la autora a determinados aspectos de la psicología femenina.
Nos presenta una protagonista desestructurada y traumatizada que lucha con todas sus fuerzas por huir de su pasado, transformándolo. La autora nos presenta varios temas: el proceso de maltrato en una pareja sin que sea perceptible para los hijos, las secuelas psicológicas de las guerras, la cimentación del pensamiento patriarcal (y su apoyo social) o la decadencia económica del medio rural tradicional...
Es destacable el crimen nuclear de la novela, tan original como truculento.
¿Salvará el amor finalmente a la protagonista? Me temo que no.
En resumen, interesante y pesimista.
JAVIER
Joyce Carol Oates es una de las más importantes autoras de la novelística norteamericana del momento. Ha escrito más de 50 novelas y 200 relatos, ha obtenido innumerables premios y es una de las eternas candidatas al Premio Nobel de Literatura.
A Abby, la víspera de su matrimonio, le retorna una terrible pesadilla infantil, al día siguiente a la boda es atropellada por un autobús. Su marido iniciara una investigación para saber si ha sido un accidente o se ha lanzado ella. Todo ello destapara una terrible historia de violencia familiar. Es una novela profundamente emotiva, lo realmente importante es lo que siente sus protagonista, los hechos siempre nos los muestra a través del filtro de uno de sus protagonistas, pone de manifiesto cuán diferente es la "realidad" contada por cada uno de los protagonistas. Es una sinfonía de sensaciones y sentimientos, miedo, amor, odio, celos, desprecio...
El relato nos muestra una relación familiar altamente tóxica que marcará a la protagonista desde la niñez. La forma de exponer este caso de violencia doméstica, dominada por su faceta emotiva, dirigiéndose directamente a nuestros sentimientos, hace especialmente terroríficas las escenas, nos invita a compartir los olores del miedo, la desesperación ante una muerte lenta y horrible.
La novela no sigue el esquema tradicional de averiguar quién es el criminal; nos muestra cómo se gesta el crimen, cómo un hombre normal, dentro de una pareja aparentemente normal, evoluciona, va perdiendo sus corazones sociales hasta el punto de llevarle a cometer un crimen sumamente cruel. No es un psicópata, son sus sentimientos los que le van influyendo para dar sus pasos, es la corrupción de su cariño, la concepción posesiva del amor aprendida en su juventud, lo que le lleva a su crimen. Una novela muy bien escrita, de las que impactan y dejan huella. Muy buena.
P.D. Pero... al fin y al cabo ¿no es el marido amoroso de la protagonista igual que su padre?
CÉSAR
Una buena historia, está bien escrita y consigue mantener el interés del lector. Me llama la atención la forma de llevar el suspense, un tanto desconcertante, mezclando los sueños y los recuerdos de su protagonista. Utiliza con inteligencia los cambios de puntos de vista, especialmente interesante en el caso de los padres: él, maltratador que se justifica por sus celos; ella, maltratada que minimiza el maltrato.
JOSE
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